Tras nueve años sin cambios, y junto al nuevo iMac M4 Apple finalmente actualizó ayer su Magic Mouse, que ahora pasa a usar USB-C en lugar de Lightning. Sin embargo, el polémico puerto de carga sigue exactamente donde estaba: en la parte inferior del ratón, inutilizándolo mientras se carga.
Esta decisión, que viene de 2015, lleva desde entonces siendo objeto de quejas y también de burlas. Que Apple la mantenga casi diez años después significa que no es un error de diseño, sino una declaración de principios llevada al extremo.
Esencialmente, Apple está diciéndonos “este es un dispositivo inalámbrico, y punto”. Apple no quiere que usemos el ratón con un cable, ni siquiera diez minutos. Es una postura inflexible sobre la experiencia de usuario que Apple considera correcta. Independientemente de lo que prefieran los usuarios.
Hemos visto esto antes. El primer Apple Pencil, también de 2015, tenía que cargarse sobresaliendo del iPad como una antena improvisada. La imagen era espantosa. Apple incluía un adaptador para cargarlo con cable, pero en la práctica todo el mundo recurría a algo más cómodo aunque difícil de digerir: el lápiz sobresaliendo del puerto.
La diferencia es que el Pencil, si queríamos, sí podíamos usarlo mientras se cargaba si usábamos el adaptador. Con el Magic Mouse no hay alternativas.
Los defensores más acérrimos y acríticos de Apple, una figura que ya suena anacrónica, argumentan que el Magic Mouse se carga rápido y que unos pocos minutos te dan horas de uso. Es cierto. También dirán que mover el puerto arruinaría las líneas impolutas de su diseño. También es cierto.
Pero estas justificaciones ignoran lo más importante: Apple está priorizando la pureza del concepto por encima de la flexibilidad práctica.
Es casi como si Apple dijera “si quieres usar un ratón con cable, aunque sea durante cinco minutos, compra otro ratón”. El Magic Mouse es inalámbrico por definición, no por elección. Es un ejemplo extremo de cómo Apple a veces empuja su visión del futuro eliminando opciones en lugar de añadiéndolas.
La actualización a USB-C confirma que esto no es un descuido o una limitación técnica temporal – es una decisión deliberada que Apple está dispuesta a mantener indefinidamente. Para bien o para mal, el Magic Mouse seguirá siendo el dispositivo que se niega a ser usado con cable, incluso cuando necesita uno para cargar.
¿Es esto malo? Depende de tu perspectiva, pero ilustra perfectamente cómo el legendario enfoque de Apple en el diseño puede convertirse ocasionalmente en dogma. A veces, la mejor experiencia de usuario es simplemente dar a los usuarios más opciones, no menos.
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La noticia
El nuevo Magic Mouse sigue sin poder usarse mientras se carga. Y eso es exactamente lo que Apple quiere
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Xataka
por
Javier Lacort
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